¿Es realmente saludable tomar aceite de oliva en ayunas?
Muchas personas lo hacen como parte de su rutina matutina, pero ¿está respaldado por evidencia? En este artículo te explicamos los principales beneficios del aceite de oliva virgen extra (AOVE) cuando se consume en ayunas, basados en estudios científicos y experiencia en nutrición.
Si estás buscando una forma natural de mejorar tu salud digestiva, tu metabolismo y tu energía desde primera hora del día, esta guía es para ti.
¿Qué significa tomar AOVE en ayunas?
Consumir aceite de oliva virgen extra en ayunas significa ingerirlo antes del desayuno, generalmente 1 o 2 cucharadas, sin otros alimentos.
Este hábito se ha vuelto popular en estilos de vida saludables por su potencial para activar funciones digestivas, depurar el organismo y mejorar la absorción de nutrientes.
Beneficios del aceite de oliva en ayunas
1. Estimula la digestión de forma natural
El AOVE activa la producción de bilis y enzimas pancreáticas, ayudando al cuerpo a prepararse para digerir alimentos más eficientemente.
También puede contribuir a prevenir la acidez y el malestar estomacal en personas con digestiones lentas.
2. Ayuda a la limpieza del sistema digestivo
Gracias a su efecto lubricante, el aceite de oliva favorece el tránsito intestinal y puede aliviar el estreñimiento leve.
Consumido en ayunas, actúa como un “activador suave” del sistema digestivo sin necesidad de laxantes artificiales.
3. Contribuye a la función hepática y detoxificación
Tomar AOVE en ayunas estimula el hígado, favoreciendo su papel como órgano depurador.
Además, el ácido oleico del aceite de oliva regula la producción de bilis, esencial para eliminar toxinas acumuladas durante la noche.
4. Mejora la absorción de vitaminas liposolubles
Las vitaminas A, D, E y K necesitan grasa para ser absorbidas. Iniciar el día con una dosis de AOVE mejora la biodisponibilidad de estos micronutrientes cuando luego consumes frutas, vegetales u otros alimentos.
5. Puede favorecer el control del apetito
Varios estudios indican que las grasas saludables como las del AOVE aumentan la saciedad.
Tomarlo antes de desayunar puede ayudarte a controlar los antojos durante la mañana y reducir el exceso de calorías a lo largo del día.
6. Aporta antioxidantes desde primera hora
El aceite de oliva virgen extra es rico en polifenoles, especialmente si proviene de recolección temprana. Consumirlo en ayunas protege las células del estrés oxidativo, ofreciendo una defensa antioxidante desde el inicio del día.
¿Cómo tomar aceite de oliva en ayunas correctamente?
- Cantidad recomendada: 1 o 2 cucharadas soperas (10–20 ml)
- Forma de consumo: solo o con unas gotas de limón para mejorar sabor y efecto digestivo
- Momento ideal: al levantarte, con el estómago vacío, al menos 20–30 minutos antes del desayuno
⚠️ No sustituye medicamentos ni tratamientos. Si tienes enfermedades digestivas o hepáticas, consulta con tu médico.
¿Está respaldado por la ciencia?
Sí. Estudios publicados en revistas como Food & Function y Nutrients han demostrado que el consumo regular de aceite de oliva virgen extra tiene efectos antiinflamatorios, antioxidantes y metabólicos, especialmente cuando se toma en ayunas de forma constante y en pequeñas dosis.
La clave está en la calidad del aceite. Un AOVE de recolección temprana y prensado en frío, como olivumNG, contiene niveles más altos de polifenoles que multiplican estos beneficios.
¿Cuántas cucharadas de AOVE se recomienda tomar en ayunas?
Lo ideal es tomar entre 1 y 2 cucharadas soperas (10–20 ml) en ayunas, preferentemente con el estómago vacío y 20 minutos antes del desayuno.
¿Es mejor tomar el aceite de oliva solo o con limón?
Ambas formas son válidas. Añadir limón puede potenciar el efecto digestivo y hacer el sabor más agradable para algunas personas.
¿Se puede tomar aceite de oliva en ayunas todos los días?
Sí. Siempre que se consuma con moderación y dentro de una dieta equilibrada, es seguro y beneficioso tomar AOVE diariamente.
¿Tiene contraindicaciones tomar aceite de oliva en ayunas?
En personas sanas, no. Pero si padeces problemas digestivos o hepáticos graves, consulta primero con un profesional de la salud.